Gracias a James Bond, Pierce Brosnan se ha deleitado con el norte y el sur español. Vio el Guggenheim en «El mundo nunca es suficiente» (1999), y las playas gaditanas –emulando un paisaje cubano- en «Muere otro día» (2002).
Saliendo a los países vecinos, «Amélie» nos lleva de paseo por el Montmartre. La capital francesa tiene más filón fílmico que la lusa. Son varias las que se han rodado en Portugal, pero no han conseguido tanto reconocimiento. Una pena, porque el encanto que desprende Lisboa está desaprovechado. Pero hay ejemplos como «Capitanes de abril» (2000), ópera prima de María de Medeiros
Llegados a Reino Unido, Londres ofrece bonitas postales; Hugh Grant da fe en ello en «Notting Hill» (1999), donde el conocido barrio es otro protagonista. Pero la ciudad da para más, y bien lo demuestra «Love Actually» (2003). Si se prefiere paisajes naturales, está la bella Escocia, vista en «Braveheart» (1995). Si se prefiere la verde Irlanda, mira «El viento que agita la cebada» (2006).
Podemos ver el Berlín Oriental que emula Daniel Brühl en «Good bye Lenin» (2003), o recorrer Ámsterdam como hacen los chicos de Danny Ocean en «Ocean’sTwelve«. O pasear por Viena con Hawke y Delpy en «Antes del amanecer» (1995).
Y por supuesto, siempre está Italia, donde se puede recorrer en moto Roma, como Audrey Hepburn en «Vacaciones en Roma» (1953), o ver el idílico Positano, el telón de fondo donde Robert Downey Jr. intentaba conquistar a Marisa Tomei en «Sólo tú« (1994). También ir a las islas griegas como Meryl Streep y compañía en «Mamma Mia« (2008).
Si prefiere las altas temperaturas, elija Suecia, la que aparece en «Melancolía» (2011) de Lars Von Trier; o siga a Najwa Nimri en «Los amantes del Círculo Polar« (1999), porque Ana, su personaje se muda a Finlandia.
¿Prefiere dosis de exotismo y sensualidad? Mire «La Pasión turca» (1994), donde Ana Belén corría una tortuosa relación llena de entresijos.
China siempre está entre los destinos favoritos, y recogida en varias ocasiones, como en la colosal «El último emperador«(1987)
¿Quiere ver Sudáfrica? No es mala opción si les gusta la buena música, como la que compone Rodríguez; el maravilloso documental «Searching for Sugar Man» (2012) viaja al país africano en busca de pistas de un músico.
Por María Aller
